BUSCA LO QUE TE TE HAGA SENTIR BIEN

 

Hay que hacer muy poco para crear momentos especiales donde haciendo feliz a otros, consigues alcanzar ese estado de placer y satisfacción que todos buscamos. Nada mas sencillo como ponerte ropa deportiva, cargar una mochila, tirarte con un patinete y escuchar las carcajadas de mi hijo es lo que me llenó este día.

 

Ahora empieza Semana Santa ¿que vas a hacer en estas vacaciones?

El evadirnos mentalmente y tomarnos unas horas o días para desconectar de la cantidad de preocupaciones que nos secuestran a diario, es necesario para la salud emocional. Parece sencillo pero es cierto que para muchos no lo es, ya que tienen, a nivel inconsciente, un hábito de pensamiento adquirido y bien arraigado que se resiste al cambio. Esto no quiere decir otra cosa que, si realmente quieres que tu mente tome unas vacaciones, tendrás que esforzarte un poco en romper ese esquema mental “haciendo cambios”.

Practica estos días de vacaciones de semana santa:

1- Flexibilidad: No se trata de obligarte a disfrutar sino tener predisposición para hacerlo. Está bien que organices algún plan pero si planificas milimétricamente la mayor parte del tiempo de vacaciones, estás entrando de nuevo en los horarios establecidos y las obligaciones. De lo que se trata es de sentirnos libres de todas las presiones del reloj y dejarnos llevar por lo que nos vaya apeteciendo en cada momento. El objetivo que tienen las vacaciones es reducir el estrés si lo tenemos o evitar que aparezca. Las prisas y responsabilidades, el estar siempre pendiente de una agenda, hace que podamos tener síntomas de estrés.

2- Haz un buen uso de la tecnología. Piensa que es igual de estresante estar continuamente pendiente al móvil, que estar incomunicado. No seas esclavo de la tecnología y gestiona tu tiempo. A veces, por estar tan pendiente a lo que pasa al otro lado de la pantalla dejas de disfrutar o te pierdes detalles de lo que pasa a tu alrededor. Apaga el móvil o no lo saques del bolso. Si antes se podía vivir sin teléfono seguramente no pasará nada si estás desconectado dos o tres horas mientras disfrutas de la presencia de otros o simplemente contigo mismo.

3- Haz algo diferente. No se trata de alquilar un apartamento u organizar un viaje, (que si puedes permitírtelo estaría genial), me refiero a romper con la rutina y hacer algo que no hagas en tu día a día. Irte de caminata, almorzar en ese restaurante que tanto te gusta, organizar una escapada a uno de los tantos pueblos preciosos que tiene la isla, reunirte con amistades que, por el ritmo de vida que llevas, no puedes ver con tanta frecuencia como te gustaría, salir en bici, hacer algo de ejercicio etcétera

4- La pereza, lejos de producir descanso, produce cansancio. Descansar, no hacer nada y permitirte aburrirte tampoco está mal siempre y cuando lo hagas, no por pereza, sino porque vas a disfrutar de un día sin actividad. También hay que disfrutar de los días tranquilos y aprovechar para escuchar música, tumbarte en el sofá y demás. El objetivo sería disfrutar de la casa en tiempo de vacaciones con la calma que no te permite la rutina diaria. Pero ¡ojo!, si eres consciente que la pereza es lo que te prohíbe activar el modo on, cargar las pilas y hacer algo diferente, ignórala y ponte en marcha. De lo contrario, conseguirás descansar físicamente pero no mentalmente.

La idea de vacaciones es darse vacaciones a uno mismo

Tamara de la Rosa

Deja un comentario